685964805 esvibar@gmail.com

Riba-roja, del plano a la realidad material.

Vamos a dedicar unas entradas de este blog, a explicaros el proceso de diseño y construcción de las casas prefabricadas que diseñamos para Construcciones ALC. Hemos escogido la vivienda de Riba-roja, que estamos construyendo en estos momentos, para apoyar los textos en las imágenes tomadas durante la obra. El primer paso siempre se da en la oficina, donde diseñamos la vivienda a medida de cada cliente, adaptándonos a la parcela y a su entrono, además de a las necesidades personales de cada uno de los futuros habitantes de la casa. Cuando nuestro cliente ya se encuentra cómodo y convencido con la distribución diseñada para la vivienda y sus espacios exteriores, su volumen, forma, materiales, acabados, etc. redactamos toda la documentación necesaria para solicitar la licencia de obras.

Una vez las entidades locales conceden la misma, da comienzo el proceso constructivo propiamente dicho. El primer paso consiste en la limpieza de la parcela, seguido del replanteo de la vivienda en el interior de la misma, de ser necesario, por no estar bien acotados los lindes de las parcelas vecinas con esta, acude el topógrafo a delimitarla. Comprobado que la casa diseñada se encuentra correctamente ubicada en la parcela, se procede a realizar la excavación para la cimentación y disponer los armados de la misma.

Acto seguido, se procede al hormigonado de la misma. Transcurrido el tiempo de fraguado del hormigón continuamos con la construcción de la parte de los muros de carga que van a quedar enterrados sobre la cimentación, además, trabajamos todas las capas que componen la solera que nos aislarán del suelo, tanto a nivel térmico como de impermeabilización (encachado de gravas, geotextil, lámina plástica, aislante térmico, hormigón armado, tantas como resulten necesarias según el caso), finalmente se dispone el armado y se vierte el hormigón de la solera. 

A continuación, se procede a la construcción de los muros de carga, elevándose desde la cota de solera hasta la cara de abajo del forjado de la planta mediante fábrica de arcilla aligerada, esta tiene unas propiedades físicas excelentes que dotan a la vivienda de aislamiento térmico y acústico extra respecto a otro tipo de muros. En el proceso de construcción de los mismos, se respetan los huecos diseñados en proyecto para disponer las futuras ventanas, balconeras y puertas de la vivienda, realizando los dinteles estructurales de estos huecos totalmente integrados en el muro de carga. Estos muros se coronan mediante un zuncho perimetral de atado, que al hormigonarse ata toda la estructura para conseguir que trabaje de forma solidaria.

Los muros reciben las placas alveolares, elementos de hormigón prefabricados, que nos suministra desde el almacén y se quedan montadas en menos de una jornada laboral. Los operarios, disponen las armaduras calculadas en proyecto sobre estas placas de hormigón y se procede a verter el hormigón que da consistencia al conjunto, convirtiéndose en una gran losa ligera armada. Acto seguido, podemos continuar realizando trabajos en el interior de las estancias, como por ejemplo, verter el mortero autonivelante, ya que este sistema estructural no necesita ser apuntalado, ni esperar 28 días a que fragüe el hormigón para poder continuar con los trabajos.