El diseño de esta vivienda nace de cubrir las necesidades habitacionales de una joven pareja y su hijo pequeño. Desean construir una vivienda cómoda y funcional, con lineas puras y forma contundente, pero a su vez nos comentan que les gustaría que su volumen no se lea como un simple prisma, sin ninguna gracia estética. Les sugerimos romper dicho volumen mediante un voladizo, que generando una terraza cubierta volcada al espacio exterior, adueñándonos de la transición interior-exterior y ganando un ambiente cubierto donde relajarse. Además este voladizo se resuelve mediante una cubierta de gravas, donde disponer jardineras y dotar de vegetación a la planta primera. Finalmente, también adelantamos ligeramente el volumen del recibidor de la vivienda, invitando a los usuarios a acceder a la vivienda. 

El interior se organiza en dos plantas, con un carácter muy marcado en cada una de ellas. La planta baja nos recibe en un espacio de techos altos, con vistas a la escalera en forma de L, que dominará este espacio a modo de escultura. A mano derecha encontramos el salón comedor, abierto al jardín, muy luminoso y ventilado, integrará en el mobiliario una estufa de biomasa, generando un ambiente muy acogedor. Accedemos desde el mismo a una amplia cocina, desde esta también se da un acceso directo al espacio exterior, esta dotada de una bancada de trabajo de nuevo en forma de L y unas columnas de almacenamiento donde se integraran los electrodomésticos. El programa de día, desarrollado en esta planta, se remata con un baño completo, al cual se accede desde el distribuidor.

La planta primera, aloja el programa más intimo, con los tres dormitorios y un baño completo. Los espacios superiores tienen vistas a la cubierta verde situada sobre el voladizo, excepto el distribuidor lineal, que recibe luz desde la fachada latera, mediante la ventana que baña la parte superior de la escalera.

La vivienda se encuentra en este momento en la fase de obra donde se eligen y aplican los materiales de acabado, tanto a nivel interior como de exteriores. Los propietarios se han decantado por el porcelanico, escogiendo una imitación a madera para el suelo, alicatados con tectura de aspecto cementoso en diferentes tonos para las zonas húmedas y estan barajando la posibilidad de realizar el revestimiento de los peldaños de la escalera con este tipo de material mecanizando los bordes.

En el cuerpo exterior primará el blanco, mediante la aplicación de mortero hidrofugo maestreado, contrastando con las carpinteria de PVC en color nogal. Además, se revestirá con alicatado la esquina del volumen del prisma, dotando de carácter y personalidad propia a la vivienda.